El tiempo vuela dicen algunos: Todo un mes había transcurrido desde que llegaron nuestros héroes a la tierra de la pasta y la pizza. Cuando Ron ya se sintió mejor Wade volvió a su casa, extrañaba su cuarto. La ultima semana y media el joven Avatar comenzó con un duro entrenamiento dedicado a aprender principalmente los movimientos básicos. <<¡Así no!>> se escuchaba en toda la casa los gritos de Max al regañar a su pupilo cada vez que fallaba, lo que era muy seguido. Para practicar el chico se vestía con una polera sin mangas y unos pantalones viejos, debía hacerlo ya que al final de cada día terminaba hecho un desastre él y su ropa; sus manos y pies quedaban molidas de tanto manipular rocas por lo que pasaba largo rato sumergiéndolos en recipientes de agua caliente, Kim se reía con la expresión de alivio que hacia su novio al hacer contacto con el tibio líquido.
-Bien. Ahora intentaremos algo más difícil: controlar rocas grandes –le anunció Max a Ron una mañana lo que lo puso muy ansioso.
Luego de mostrarle como se hacia, el rubio lo intentó; hizo un par de movimientos con los brazos y los alzó en dirección al techo, al hacerlo sintió que estaba realizando un gran esfuerzo sin estar levantando nada directamente, la tierra tembló pero nada salió de esta.
-¿Y ahora que? –Preguntó al ver que la técnica no funcionó.
-Mmm –divagó un segundo y luego dijo: ya sé cual es el problema, mira esos brazos son solo hueso y queso para nachos.
-Oye no te metas con el queso –le reprochó enojado.
-A lo que voy es que necesitas músculos si quieres levantar más peso. Así que de ahora en adelante tu entrenamiento incluirá levantamiento de pesas, trote en las mañanas, y además de que un maestro tierra debe tener una sólida base, así que ejercitaremos tus piernas también.
-¡Ahhh! No inventes, más entrenamiento, no podré con tanto.
-Nadie dijo que sería fácil. ¡Ya! A trabajar quiero cien flexiones de brazo. ¡Ahora! –Gritó. De inmediato el muchacho comenzó con el ejercicio.
-Abuelito no serás muy duro con él -le dijo Kim mientras se acercaba pero sin que Ron los oyera.
-Kim tu novio tiene mucho potencial pero es muy flojo. Por eso es necesario todo esto.
-Está bien supongo –concluyó la pelirroja.
-57... 58... 59... 70 –decía Ron mientras a duras penas se levantaba del suelo para volver a caer.
-¡Hey! No te pases de listo conmigo, luego del cincuenta y nueve viene el sesenta, no soy idiota, por eso harás veinte más.
-Ahhhh no puedo seguir –el chico cayó rendido al suelo -. No puedo creer que haya alguien peor que Barkin –murmuró en voz baja.
-Solo por Kim te dejaré descansar, pero a la tarde continuamos.
Rufus se acercó a su amo e intentó levantarlo desde el mentón, Kim lo ayudó y salieron al estudio donde se postraron en el sofá a ver televisión y comer algo, Kim se acomodó sobre el cuerpo de Ron poniendo la cabeza en el pecho del rubio el que la besó en la cabeza al sentir su peso contra él.
En eso el rubio estiró la mano para sacar nachos del plato ubicado en una mesita junto a ellos, pero solo sintió el fondo de este.
-Voy por más nachos, ya vuelvo -dijo poniéndose de pie.
Al rato volvió con una cara pálida y angustiada.
-Kim algo terrible ha pasado –dijo.
-¿Qué cosa? –Preguntó preocupada y al ver la cara que tenía más aumento ese sentimiento.
El rubio cayó de rodillas y gritó alzando los brazos: ¡se acabaron los nachos!
Al oírlo Rufus y Kim se golpearon la frente con la mano simultáneamente.
-Ron no crees que estás exagerando.
-Todo Kim, todo lo que traje del Buen Nacho se acabó; los nachos, nacos y los burritos.
-Gup gup alarma de exageración –dijo sonriente la chica.
-Es algo serio Kim. Debo ir a comprar más para renovar mis provisiones ¿habrá un Buen Nacho en la ciudad?
-No puedes, tienes que seguir entrenando, pero no te preocupes, yo iré por ti en unos días cuando haga las compras.
-Gracias cielito me salvaste.
-Todo por mi Avatar.
-Jeje si –dijo rascándose la cabeza. Para luego darse un cálido abrazo entre ellos.
Días después comenzaba la practica habitual, mientras Kim iba al supermercado y de paso al Buen Nacho de la ciudad.
Aunque haya sido muy poco tiempo desde que Ron empezó con los ejercicios, estos tuvieron resultados inmediatos que impresionaron a todos: sus brazos y piernas se fortalecieron y su resistencia había aumentado significativamente, <<que músculos señor Imparable>> le decía Kim muy coqueta cuando lo abrazaba. Ahora levantar rocas era pan comido o mejor dicho naco comido. Había trabajado en técnicas de ataque, defensa y distracción las cuales con el tiempo fue mejorando bastante.
-Ron quiero felicitarte por el progreso que has tenido, demostraste un aprendizaje más rápido que cualquier otro de mis alumnos.
-Gracias Sifu Max.
-Bien continuemos.
En esta ocasión el chico se vendó los ojos con una cinta negra.
-Un maestro tierra es capaz de sentir las vibraciones de la tierra en sus pies, si que te lanzaré una serie de ataques y tu deberás prevenirlos y evitarlos. ¿Estas listo?
El rubio ajustó la venda por detrás y se paró con las piernas abiertas y con las manos extendidas hacia el suelo.
-¡Adelante! –Le gritó enérgico.
El abuelo golpeó el suelo con el pie izquierdo y tres rocas medianas se suspendieron en el aire como si la gravedad no existiera, al momento de patearlas la imagen se congeló en un tono oscuro, las ondas que emitían los movimientos de Max en el suelo se propagaban hasta llegar bajo los pies de Ron. Podía sentir cada movimiento que realizaba. La imagen volvió a la normalidad y el hombre pateó seguidamente las piedras en dirección al rubio: la primer la esquivó con un veloz movimiento de la cabeza hacia un lado, la segunda iba hacia su pecho y la evitó dando una voltereta hacia atrás y la ultima venía muy rápido por lo que no alcanzó a esquivarla, no obstante interpuso el puño en su camino y la roca se desintegró al impactar contra su mano.
-Bien hecho pero no he terminado aun –gritó Max golpeando el suelo con el pie en un ángulo mayor que antes en dirección al chico, al hacerlo una serie de levantamiento de roca que surgieron del piso se acercaban peligrosamente hacia el muchacho, él lo sintió justo antes que lo golpearan, hizo un movimiento con la mano que desvío el ataque hacia su costado.
Esto enfocó toda su atención por lo que no pudo prevenir la roca que rápidamente le lanzó su maestro la cual dio de lleno en su cabeza.
-¡Aya yaya yai! –Gritó de dolor doblando las rodillas y sujetándose la cabeza con las manos imitando a cierto personaje japonés. Un gran chichón apareció donde recibió el golpe.
-Nunca debes perder la concentración, alguien podría atacarte cuando menos lo esperas –gritó el abuelo con un tono de risa.
-Me dolió mucho. Toma esto –exclamó sacando una roca en forma de disco de la tierra bajo él, tenía forma de moneda con un agujero cuadrado en el centro, con el puño la impulsó hacia el hombre, el cual creó una pared de piedra que lo protegió del golpe.
-¡Hey no te desquites conmigo! –Le reprochó Max.
Luego de relajarse un rato y ponerse una bolsa de hielo en el palpitante chichón, Max decidió que su pupilo ya estaba listo para aprender una técnica avanzada.
-Bien ¿qué haremos ahora? –Dijo frotando una mano contra la otra en señal de ánimo.
-Observa esto –se paró en medio del cuarto, respiró profundo con los ojos cerrados, luego los abrió y comenzó a dar una serie de pequeños saltitos como si el suelo bajo él estuviera caliente o intentara aplastar una escurridiza cucaracha, la verdad se veía bien ridículo pero el efecto que causaron fue impresionante: gigantescos bloques de roca sólida se elevaban a su alrededor, Ron tomó distancia, notó que el que estuviera cerca de él recibiría un gran daño. Los bloques subieron y bajaron unas tres veces seguidas más antes de que se detuvieran dejando una nube de polvo en el lugar.
-Wow eso fue: ¡Genial! –Expresó el rubio su fascinación por el dominio de su maestro.
-Ese es uno de los ataques más poderosos de un maestro tierra, cualquiera que sea afectado por él puede llegar a ser noqueado de inmediato.
-De seguro eres el mejor maestro tierra de la historia.
-No, no lo creo, aun me falta mucho que aprender –dijo recordando su meta de llegar a dominar el metal.
Todo esto había ocupado la mente de Ron lo que lo hizo olvidarse de algo:
-Ahora que lo pienso. Kim se fue hace rato ya debería haber regresado.
-¿Dónde fue?
-De compras dijo que no tardaría, quizás ya llegó y no nos dimos cuenta –el rubio salió de la habitación y le dio una vuelta a la casa, luego volvió -. No está en la casa.
-Que extraño, supongo que debe haberse entretenido con algo por ahí –murmuró Max.
-Si tal vez iré afuera a ver si llega.
Pero al abrir la puerta de entrada dio una rápida vista a la calle y se extrañó al ver que el auto estaba allí, ella se lo había llevado para ir a comprar. Luego observó un bulto en la acera cerca del auto, se acercó a él y lo reconoció como una de las bolsas del Buen Nacho tirada en el suelo, y en su interior venían los nacos, nachos y burritos que le había encargado a su novia. El corazón de Ron comenzó a latir rápidamente, ese latir que da cuando un sentimiento de preocupación y angustia inunda tu mente, <<algo le pasó a Kim>> le dice a Rufus que comenzaba a salir de su bolsillo.
Tres horas antes...
Kim se estacionaba junto a la acera, todo parecía normal excepto una sensación de silencio absoluto en el ambiente, como la del silencio antes de la tormenta. La chica tomó la bolsa que traía del Buen Nacho y bajó del auto, iba a buscar a su abuelo y novio para que la ayudaran a bajar las demás bolsas del supermercado. De repente sintió la presencia de alguien, pero no alcanzó a reaccionar: una mano tapó con un pañuelo su nariz y boca, solo alcanzó a reconocer el olor del cloroformo, luego se sintió adormilada, soltó la bolsa con el encargo de Ron y cayó en los brazos del sujeto vestido de rojo, el cual esbozó una malvada sonrisa.
De vuelta al presente en una vieja bodega en las cercanías se encontraba él. Estaba sentado en una especie de trono improvisado. Su mirada de ojos negros era de impaciencia, su larga cabellera negra terminaba en una cola de caballo, era un poco mayor que Kim y Ron debía de tener unos veinticinco años, por todo su cuerpo tenia pequeñas quemaduras producto de su arduo entrenamiento con el fuego y vestía principalmente de rojo oscuro.
Uno de sus lacayos se acercó:
-Señor Leonidas lamento no haber encontrado un lugar mejor para sus planes –declaró tímidamente.
-Ya no importa ¿capturaron a la novia de Avatar?
-Sí señor ahora mismo la traen.
Dos lacayos intentaban llevarla arrastrando por los brazos, ya había despertado y no dejaba de moverse intentando escapar <<suéltenme para darles una lección>> decía enfadada. Leonidas les dio la espalda al recibir a Kim y a los que la sujetaban.
-Bienvenida novia del Avatar y disculpa por este lugar, hoy en día es muy difícil encontrar un buen sitio desde donde infundir terror al mundo –exclamó aun de espaldas.
-Supongo que tú debes ser Leonidas, cierto.
-Asi es, veo que has oído de mí –dijo dándose vuelta hacia ella, era la primera vez que la veía y se impresionó por su despampanante hermosura -. Ehhhh –las palabras no le salían seguía atontado por la bella pelirroja.
-Tú... tú... ¿tú eres la novia del Avatar? –Tartamudeó.
-Sí ¿algún problema con eso?
-No, nada –dijo tímidamente y volvió a darse vuelta, que ella lo mirara a los ojos lo ponía nervioso.
-Ejem. Encadénenla en la pared, el Avatar vendrá para rescatarla y yo me encargaré de él.
-A sí, pues cuando llegue te pateará el trasero –le dijo la chica.
-Ya lo veremos. ¡Llévensela!
El timbre sonó en la casa de Max, el cual al abrir la puerta se encontró con un viejo conocido. Este era de más edad que él, de larga barba blanca y ojos café oscuro. Era Mark, desde hace años que no se veían por lo que se dieron un gran abrazo.
-¿Qué te trae por aquí?
-Vine a ver como van los entrenamientos del Avatar.
-Van excelente, pero ahora tenemos otro problema, alguien secuestró a Kim.
-Diablos, ¿cómo está él?
-Mal.
-¿Ya rastreaste a Kim? –Preguntaba Ron a Wade desde su ronnunicador mientras estaba en su pieza en el segundo piso.
-En eso estoy, quedan diez segundos para ubicarla por el GPS del kimmunicador. Pero antes de que se completara el escaneo se oyó el sonido de vidrio quebrándose, un as de fuego atravesó la ventana y se clavó en la pared una flecha que tenia un mensaje atado, el que seguía quemándose por lo que el rubio se apresuró a apagarlo, luego lo leyó:
Como te habrás dado cuenta Avatar capturé a tu noviecita. Así que si quieres volver al verla ven a la bodega ubicada en la calle Oliva 556.
Te esperamos.
Leonidas.
-La dirección es correcta –dijo Wade al terminarse el escaneo.
El rubio arrugó la carta con la mano <<me la pagará>> exclamó con una mirada desafiante.
-¡Max! ¡Max! –Gritaba bajando las escaleras -. Ya sé quien secuestró a Kim.
-Hola joven Avatar –lo saludó Mark quien se encontraba con el abuelo platicando de lo ocurrido.
-Mark y tú ¿qué haces aquí? –Preguntó.
-Vine a verte, pero creo ahora es para ayudarte a encontrar a tu novia.
-Genial gracias.
-Déjame adivinar exclamó Max refiriéndose al secuestrador de Kim -. Leonidas cierto.
-Sí.
-Ese desgraciado... –expresó el más viejo de ellos.
-No hay tiempo que perder vamos a rescatarla –dijo el joven.
-Iremos todos, no sabe con quien se mete.
-Ven Rufus vamos por Kim.
-¡Sí! –Chilló el pequeño.
Mientras tanto en la bodega...
Era un lugar grande: el techo tenía gran altura y el piso estaba hecho de baldosas rojas que con el tiempo se fueron despedazando por lo que en algunos sitios se veía la tierra bajo estas, grandes focos colgaban del techo iluminando el lugar, a los costados había varias cajas llenas de cosas sin valor. Al costado derecho del improvisado trono estaba Kim suspendida por las cadenas que la mantenían en la pared.
-¿Cuál es tu nombre? –Preguntó Leonidas a la chica para hacer conversación.
-Que te importa –refunfuñó la pelirroja desviando la mirada lejos de él.
-Bueno como ahora soy el enemigo de tu novio supongo que de ahora en adelante nos veremos muy seguido y debería al menos saber tu nombre.
-Kim –le dijo cortante.
-Kim... cuánto.
-Possible...
-Mmm Kim Possible, me suena, ahhh tú eres esa que salva al mundo.
La chica no respondió.
-Jaja salvar al mundo que tontería el mundo ya está acabado, sólo cuando esté bajo mi dominio llegara a la perfección.
-Estás loco. Conozco a muchos que han dicho lo mismo y siempre se equivocan. Usas el pretexto de un mundo mejor pero lo único que quieres es poder y más poder.
-Ya lo veremos –le contestó.
De repente el lugar comenzó a temblar, sus soldados estaban a un costado de él y les costaba mantenerse en pie por el fuerte movimiento. <<Aquí viene>> anunció el villano. El suelo se resquebrajó frente a él y desde el subsuelo surgió un chico dando vueltas como un taladro. Era Ron, traía la ropa que Mark le obsequió, el cual lo siguió junto con Max apareciendo de la misma forma.
-¡Ron! –Gritó feliz la chica desde la pared.
-Nos conocemos al fin y veo que llegaste acompañado.
-Sí y te enseñaremos lo que pasa cuando te metes con nosotros.
-No me hagas reír. ¡Ustedes! –Señalando a sus secuaces -. Encárguense de los ancianos.
-Y ¿por qué yo no? –Le rezongó el rubio.
-Porque yo mismo me encargaré de derrotarte –al decir esto dio un gran salto y aterrizo frente a Ron.
-Rufus ve a refugiarte esto puede ser peligroso –dijo dejando al ratopín en el suelo.
-Si –le respondió.
Leonidas dejó ver la palma de su mano de la que surgió una pequeña llama <<que empiece el juego>> dijo desafiante.
La tan esperada batalla había comenzado:
Leonidas hizo el primer movimiento lanzando incandescentes bolas de fuego hacia Ron, el cual atrajo pequeñas rocas que se agruparon pegándose a sus brazos formando una sólida armadura con los cuales desvió el ataque. Por otro lado los ancianos se desenvolvían muy bien contra sus oponentes, aunque era notorio que el dominio de Max era superior al de Mark a pesar de su edad superior <<creo que el estudiante superó al maestro>> reía el monje viendo pelear al abuelo de Kim. Efectivamente él le enseñó todo lo que sabía. La pelirroja observaba la pelea sin poder hacer mucho, le habían quitado el kimmunicador y todos sus artefactos por lo que no podría escapar por su cuenta. Se sentía muy orgullosa por el progreso que había tenido su novio el que se evidenciaba en aquel momento.
-Kim tú tranquila preciosa, acabo con este sujeto, te libero y vamos a comer algo –la chica le sonrió dulcemente.
-Oye déjate de juegos y pelea –le gruñó Leonidas lanzando una estela de fuego con el pie de una patada, la que pasó rozando la cabeza de Ron. Aun así sintió el incandescente calor que producía.
-Estuvo cerca pero Don Ron también tiene lo suyo –como lo había practicado sacó una gran roca y se la arrojó a gran velocidad, a pesar de eso él no se movió un centímetro para evitar el ataque, en vez de eso rodeó su mano de fuego y la golpeó destrozándola en pedazos.
-Rayos –murmuró Ron en voz baja -. Sabes algo, no me gusta el nombre Leonidas te puedo decir Leo o Leito. Eso ahorrará tiempo no crees.
-¡No lo creo payaso! - <<como es posible que este idiota tenga una novia tan sexy>> pensó celosamente el tipo. Este volvió a atacar: esta vez juntó las palmas de sus manos y de entre estas salían llamas a nivel del suelo, las que le rubio bloqueó elevando una pared desde la tierra.
-Veo que Max te ha enseñado bien. Pero un mes de entrenamiento no le gana a toda una vida –gritó formando una gigantesca esfera de fuego sobre él, la que lanzó contra nuestro héroe, pero este se quedó inmóvil ante aquel ataque.
-¡¡¡Diablos!!! –Dijo asustado, ya que si ese ataque le llegaba le haría mucho daño.
Su reacción instintiva fue proteger todo su cuerpo con rocas, parecía aquel miembro de los cuatro fantásticos, pero no fue suficiente. La poderosa bola del ardiente elemento destrozó su armadura y lanzó al muchacho muy lejos, dejando atrás los trozos de roca que lo cubrían.
-¡Ron! –Gritó Kim.
El chico quedó tirado en el suelo y varias quemaduras se veían en su cuerpo producto del salvaje ataque recibido.
-¡Desgraciado te mataré! –Le gritó Kim intentando liberarse de las cadenas lo cual era inútil.
-Ah casi me olvido de ti –dijo Leonidas acercándose a Kim -. Ahora que tu noviecito no está para salvarte, tengo algo especial para ti –le dijo valientemente ya que como antes se sentía muy nervioso cerca de ella.
Ron se levantaba del duro golpe y se tocó la cabeza con la mano <<¡Au! Eso dolió>>dijo mirando sus quemaduras, luego fijó la mirada en su oponente que se acercaba a su novia.
-Oye ¡aléjate de Kim o será tu fin!
-¡Ah cállate peste! –Exclamó lanzando una bola de fuego al techo lo que hizo que varios escombros cayeran sobre el debilitado chico.
-¡Ron no! –Volvió gritar Kim.
En realidad Leonidas no quería hacerle daño a Kim, ni nada por el estilo, sólo lo hacia para enfurecer y atacar sicológicamente al Avatar. Lo que fue un gran error:
Desde la profundidad de los escombros una luz celeste comenzó a aparecer irradiándose en todo el lugar, de a poco esta aumentó y un poder enorme se sentía en el aire. Los escombros empezaron a levitar alejándose de Ron que se ponía de pie, y al verse su rostro todos notaron que sus ojos estaban inundados de un deslumbrante brillo similar a la luz anterior. Entonces procedió a caminar en dirección a Leonidas que permanecía atónito por el cambio que sufrió el chico, Kim estaba a su lado y pensó: << ¿es el poder místico del mono? No, es algo más, parece que está fuera de si>>.
Más secuaces aparecieron y rodaron al muchacho para atacarlo. Este ni se inmutó y los miró de una manera fría, luego como si lo hubiera hecho muchas veces comenzó a dar los pequeños saltos que producían la poderosa técnica que Max le mostró, los enormes bloques golpeaban a los hombres reiteradamente dejándolos a todo inconscientes en el suelo.
-Veo que ahora eres más fuerte, pero ni así me ganas –gritó corriendo hacia el chico con el puño rodeado de fuego para asestarle un golpe, que le respondió raspando el suelo con la planta del pie lo que movió la tierra bajo Leonidas haciéndolo tropezar y caer, este se puso de pie y continuó su carrera hacia él, pero ahora el Avatar hizo algo que nadie esperaba: alzó la palma de su mano y de esta surgió una poderosa ráfaga de aire que lo arrojó hasta la pared al otro lado de la bodega.
-Pero ¿Cómo?, Ron aun no ha dominado el aire como es posible que haga esa técnica –pensó Kim confundida.
La cara del rubio no cambiaba, seguía sumido en el brillo y parecía enfadado como queriendo expresar toda la rabia que había acumulado en su vida e incluso en sus vidas pasadas.
Leonidas no podía creerlo: ese novato le estaba dando una paliza, por lo que reunió fuerzas y produjo un poderoso ataque en forma de estrella, que el rubio bloqueo uniendo ambos puños generando una gran esfera de aire en rápido movimiento a su alrededor, después de esto sus pies se despegaron del suelo elevándose algunos metros y asombrosamente de sus manos, pies y boca salieron columnas de fuego que formaron una estrella gigantesca con su cuerpo las golpearon las paredes y techo donde se encontraban y que casi lastima sus amigos y novia <<ahora fuego ¿Cómo es posible?>> reiteró Kim.
El Avatar movió el brazo derecho lo que impulsó la columna de fuego con la intención de aplastar a su oponente, este lo resistió sosteniéndolo con las manos, pero no pudo ante él y la incandescente formación cayó sobre Leonidas dejándolo fuera de combate.
De a poco Ron comenzó descender y el brillo de sus ojos desaparecía volviendo a la normalidad, al llegar abajo tocó el piso suavemente.
Los ancianos estuvieron expectantes de todo lo acontecido, aunque no sabían todo sobre ello, sus conocimientos sobre el estado avatar eran limitados.
Al tocar tierra el chico se sintió débil y cayó al suelo << ¿qué sucedió?>> musitó poniéndose de pie y lo que vio lo sorprendió: todos los soldados de Leonidas estaban en el suelo y el lugar era un desastre, las cajas alrededor se incendiaban y las paredes y techo al borde del colapso estaban quemados como si hubieran sido sometidos a la temperatura de magma hirviendo.
-Kim… -recordó para luego acercarse a la pared donde estaba. Controló una rocas para destrozar las cadenas que la ataban y la chica al quedar libre, cayó en los brazos de su novio -. ¿Estás bien?.
-Yo estoy bien, pero tú ¿cómo hiciste eso?
-¿Qué cosa? –Preguntó sin saber a que se refería. En ese momento a su mente llegaron los recuerdos de la lucha anterior -. Yo ehhh no lo sé.
-Pero hiciste fuego y aire control ¿Cómo?
-Ya te dije no…. No lo sé, sólo lo hice, como si lo hubiera hecho antes.
-Chicos ¿están bien? –Gritó Max acompañado del monje.
-Estamos bien –anunciaron ambos.
-Ja me debes una soda –rió Kim.
-¿Dónde está Leonidas? –Preguntó el rubio.
-Por allá –apuntó Max en dirección al lugar donde había quedado, pero se llevó una sorpresa al ver que ya no estaba -. ¡Diablos, se escapó!
-No importa habrá otra oportunidad –reflexionó el chico.
Luego todos salieron del lugar ya que en cualquier momento podía colapsar.
Ya en casa cayeron todos rendidos en el sofá por lo cansados que quedaron como resultado de la ardua batalla.
-Creo que ya es tiempo que tú y Kim se vayan de Italia –se dirigió Max al rubio.
-¿Por qué? –Chilló Rufus.
-Ron ya sabe todo lo necesario, ahora él debe seguir entrenando por su cuenta, lo que es más importante a que otro te enseñe. Además de que debes encontrar un maestro fuego que te enseñe.
-Estoy de acuerdo, tienes razón. Pero mañana porque ahora muero de sueño.
-Duerme bien.
Kim se quedó y preguntó por que le había llamado la atención anteriormente:
-Lo que le pasó a Ron allá ¿Qué fue exactamente?
-Entró en estado Avatar –le respondió Mark.
-¿Estado Avatar? Y eso ¿qué es?
-Cuando un Avatar está en una situación de presión extrema se convierte en un poderoso guerrero.
-Pero controló el aire y el fuego aun cuando no los sabe dominar.
-La verdad, nosotros no sabemos mucho más que eso, pero te aseguro que en el camino que tomarán desde ahora encontrarán a alguien que les conteste todas sus dudas.
-Pero ahora es mejor que descanses –infirió el abuelo.
-De acuerdo buenas noches a los dos –luego se dirigió a la escalera.
-¡No olvides juntar las camas! –Le gritó con gracia a Kim.
-¡Cállate! –le gritó desde el segundo piso. Lo que hizo reír a ambos hombres.
Al otro día luego del almuerzo, comenzaron a empacar para irse a la tarde:
-Bien creo que es todo –dijo Ron cerrando la maleta del auto.
-Encontrarás un maestro fuego que te enseñe en las islas del pacifico y algunas del continente Oceánico.
-Puedes pasar a visitarme a Australia. Con gusto los recibiré.
-Bien ya es hora. Adiós señor. Gracias por ser un buen maestro.
-Gracias a ti por ser un buen pupilo y sigue entrenando tu físico es tan importante como el dominio de los elementos.
-Lo haré.
-Adiós abuelito. Te veré pronto verdad.
-Claro, después de que le haga una visita a tu abuela –le sonrió
-Te quiero –dijo dándole un abrazo.
-Y tú Mark ¿Qué harás?
-Yo también me voy, tengo un vuelo que tomar en una hora. Adiós a todos –se despidió subiéndose al taxi que había llamado previamente.
La pareja subió a su auto del bolsillo de Ron salió Rufus que se ubicó en panel del vehículo.
-Ah olvidé despedirme de ti. Hasta luego amiguito –le dijo frente a la ventana del copiloto.
-Chao –le respondió el ratopín moviendo la pata.
-¡Cuídense! –Les gritó mientras el auto se alejaba por la calle.
Unos minutos de viaje después. Kim conducía y Ron permanecía con la cabeza apoyada en el vidrio, así divisó el desvío por donde había ido en su tiempo de reflexión anterior.
-Kim dobla aquí a la derecha.
-¿Para qué?
-Ya lo sabrás.
Al llegar a la cima del cerro la noche ya había caído. Rufus se durmió y se quedó en el auto mientras los jóvenes bajaban de este.
Ron tendió uno de los colchones inflables que Wade creó en el suelo <<debí haberme traído unos de estos antes>> pensó al recordar la noche que durmió en el suelo.
-Ven Kim, siéntate junto a mí.
-¿Qué tienes en mente? –la chica hizo lo que le pidió.
-Ahora cierra los ojos y recuéstate hacia atrás.
-Bueno –cuando ya estaba acomodada en el suave colchón, el rubio hizo lo mismo poniéndose a su lado pero apoyando la cabeza con su mano para ver la expresión de su novia.
-Bien ahora abre los ojos.
Lentamente la pelirroja abrió sus ojos color verde y presenció la hermosura de ese cielo de estrellas brillantes que titilaban desde millones de kilómetros de distancia. Se sintió pequeña ante tal imponente espectáculo.
-Ron es…. es… hermoso –dijo contenta.
-No tanto como tú.
<<Ay que dulce eres>>. El momento era propicio: se miraron a los ojos, podían ver y sentir todo lo que el otro pensaba con solo mirarse de esa forma y ambos gritaban desde dentro de si mismos: << ¡Quiero besarte toda la noche! >> Lo cumplieron y sus labios se unieron en un apasionado beso, pareciera que las estrellas comenzaban a brillar más al momento que sus labios se conectaban. La confianza entre ellos no era comparable con la de nadie más. Ron comenzó a explorar con las manos las formas de Kim, lo que hizo sonreír a la chica mientras lo besaba, <<te dije que sería diferente>> le susurró el rubio. Era una experiencia nueva para ambos. Esa noche, su conexión se tradujo en la mayor muestra de amor que pueden darse dos personas que se aman. Y de esta manera continuaron amándose toda la noche bajo ese manto de estrellas.
Concluirá…
Jue Feb 10, 2022 2:29 pm por Jonnatthan
» NUEVO FORO DE KP
Sáb Jun 27, 2020 2:25 pm por Jonnatthan
» "El genio corrupto"
Dom Ene 24, 2016 11:29 pm por avp369
» EL POST DEL ODIO
Dom Ene 24, 2016 9:28 am por CassySt
» Esto o lo otro...
Sáb Ene 23, 2016 9:10 pm por avp369
» Cadena de Palabras
Sáb Ene 23, 2016 9:09 pm por avp369
» MENTIRA!!!!!!!!!!!!
Sáb Ene 23, 2016 9:08 pm por avp369
» EL ULTIMO POST GANA!!!!!!!!!!!!
Sáb Ene 23, 2016 9:08 pm por avp369
» [Descarga] Cuarta Temporada de Kim Possible
Jue Jul 30, 2015 12:01 pm por stevensalas7
» presentacion
Jue Jul 02, 2015 10:48 am por Angydrummer7
» Buenas ¿qué tal todo?
Dom Jun 28, 2015 11:32 pm por avp369
» Locuras y mas locuras
Dom Jun 28, 2015 11:30 pm por avp369
» FELIZ AÑO NUEVO 2014!!!(Y ANO NUEVO TAMBIÉN JEJEJEJE)
Mar Jun 23, 2015 11:50 pm por themisterron
» ¿Cuantos quedamos?
Mar Jun 23, 2015 11:33 pm por themisterron
» De paso por el foro...
Lun Jun 15, 2015 6:45 pm por xavo
» Ya nada es igual
Lun Mayo 25, 2015 2:39 am por MasterDex09
» Kim Possible 1 era Temporada en Latino
Miér Mar 18, 2015 5:37 am por liz.yiyi
» HE VUELTO......
Vie Mar 06, 2015 5:39 am por Villainheadache
» [Descarga] Segunda Temporada de Kim Possible
Vie Ene 09, 2015 10:54 pm por lizzy29792
» Kim Possible So the Drama (Español Latino)
Vie Ene 09, 2015 6:46 pm por lizzy29792
» [Descarga] Tercera Temporada de Kim Possible
Sáb Nov 01, 2014 5:30 am por niyu_10
» Mega Fan Fiction hecho por nosotros
Mar Oct 21, 2014 5:22 am por niyu_10
» #VotaAMono yo ya lo hice, ¿y tú?
Miér Mayo 14, 2014 1:10 am por themisterron
» la serie que mas te gusta es??
Miér Ene 22, 2014 10:02 pm por avp369
» KPSP TV (VEAMOS A KP JUNTOS!)
Vie Nov 22, 2013 2:30 am por CDJRC
» Teorías Hora De Aventura
Vie Oct 04, 2013 10:45 pm por themisterron
» EL POST QUE CAMBIARÀ TU VIDA!!!!!!
Dom Sep 29, 2013 10:42 pm por themisterron
» Firma por Kp, ahora es cuando!
Sáb Sep 28, 2013 12:01 pm por incomprendido
» Una Quinta temporada no bastara!!!
Mar Sep 24, 2013 5:55 pm por avp369
» ¡¿POR QUÉ NO TE UNISTE AL LADO OSCURO, TONTO?!
Miér Sep 18, 2013 10:55 pm por incomprendido